SFN | Barrancabermeja
En medio de un proceso judicial que ha capturado la atención de la opinión pública, Jonathan Vásquez, alcalde de Barrancabermeja, rompió su silencio tras ser acusado de participar en una red de compra de votos durante las elecciones locales de 2023, en las que resultó ganador.
El mandatario fue imputado por la Fiscalía por los presuntos delitos de corrupción al elector y concierto para delinquir, pero en un contundente video difundido en sus redes sociales, Vásquez rechazó las acusaciones y aseguró que su proceso judicial está basado en mentiras y manipulaciones orquestadas por sus opositores políticos.
«Después de escuchar a la Fiscalía, les doy la tranquilidad de que todo lo penal en mi contra está sustentado en mentiras, falsos testimonios, manipulación y tergiversación de la información», afirmó el alcalde.
Según él, la Fiscalía ha sido inducida a error por aquellos que buscan desacreditar su gestión desde el inicio de su mandato, con la intención de frenar los cambios que ha impulsado en el municipio.Los cargos y las investigaciones
El caso contra Vásquez surgió a raíz de múltiples denuncias sobre irregularidades durante la jornada electoral en Barrancabermeja, en la que se afirmaba que su campaña habría repartido sumas millonarias a cambio de votos.
La Fiscalía, en coordinación con la Policía, llevó a cabo varios allanamientos el día de las elecciones en 2023, pero, según el mandatario, no se encontraron pruebas de dichas irregularidades en ninguna de las sedes de su campaña.
Vásquez enfatizó que los únicos hallazgos relevantes durante esa jornada estuvieron vinculados a uno de sus contrincantes políticos, cuyas instalaciones sí habrían sido objeto de capturas y decomisos por compra de votos.
El fiscal 47 de la Unidad Especializada Anticorrupción fue el encargado de imputar los cargos a Vásquez, argumentando que las pruebas recolectadas sugerían la existencia de una estructura criminal creada para garantizar su victoria electoral mediante la compra masiva de votos.
Se estima que más de 12 mil millones de pesos habrían circulado como dádivas a votantes el día de los comicios, lo cual ha sido negado categóricamente por el alcalde, quien insiste en que las acusaciones carecen de fundamento.
Acusaciones cruzadas y defensa pública.
En su mensaje público, Jonathan Vásquez no solo defendió su inocencia, sino que también lanzó acusaciones contra el exalcalde Elkin Bueno Altahona, uno de los líderes de la oposición local.
Vásquez señaló a Bueno de intentar beneficiarse políticamente del proceso judicial, buscando ser reconocido como víctima en el caso que se adelanta en su contra.
Según Vásquez, su administración ha representado una amenaza para los intereses de quienes controlaron Barrancabermeja durante años, y que ahora, al haber perdido en las urnas, buscan otras formas de detener su mandato.
«Desde el día en que más de 72.000 de ustedes me eligieron como su alcalde, sabíamos que estábamos desafiando los intereses de aquellos que durante años han mantenido a nuestra ciudad sumida en la corrupción y el atraso», aseguró el mandatario en su defensa.
Agregó que, pese a la fuerte oposición, confía plenamente en que el sistema judicial actuará con objetividad y que la verdad prevalecerá en su caso.
Por su parte, Elkin Bueno desestimó las acusaciones de Vásquez y aseguró que nunca ha estado involucrado en prácticas corruptas. «Siempre he recurrido al favor popular, nunca a timar o engañar a las personas, mucho menos a pagarles para que voten por mí», dijo el exalcalde, quien también anunció que buscaría constituirse como víctima dentro del proceso penal contra Jonathan Vásquez, argumentando que las presuntas irregularidades electorales afectaron sus intereses políticos.
El proceso sigue su curso
Aunque Vásquez continúa firme en su defensa y ha insistido en que no descarta emprender acciones legales contra quienes están promoviendo el proceso en su contra, el caso avanza ante la justicia.
La Fiscalía ha dejado claro que las investigaciones apuntan a desmantelar cualquier red de corrupción que pueda haber operado durante las elecciones de 2023, con el objetivo de garantizar la transparencia en los procesos democráticos del país.
Este caso no solo pone en tela de juicio la legitimidad del mandato de Vásquez, sino que también ha generado un intenso debate en Barrancabermeja y en el departamento de Santander sobre las prácticas políticas y la transparencia en los comicios locales.
Para muchos, la resolución de este caso será clave para el futuro político de la región, mientras que el alcalde insiste en que se trata de una estrategia para desacreditarlo y frenar las reformas que ha impulsado desde su llegada a la administración municipal.
Por ahora, el panorama para Jonathan Vásquez es incierto, y queda en manos de la justicia determinar si las acusaciones en su contra tienen sustento o si, como él afirma, se trata de un ataque político sin base legal
Resumen de agencias





